MIRANDO HACIA ATRÁS Y HACIA ADELANTE.

Escrito en la tarde del domingo 12 de abril del 2020.

Gregory Porter es uno de mis cantantes favoritos. Pude verlo en persona hace años en Nueva York, cuando no era muy conocido. No me sorprende que se ha convertido en una de las grandes estrellas del jazz contemporáneo. En estos días de aislamiento voluntario, como muchos de ustedes, he estado al tanto de las terribles noticias de la pandemia y todo el daño que ha estado causando.

Duele mucho la cantidad de víctimas que se han contagiado, sobre todo quienes han perdido la vida. Duele el daño a la economía de nuestro país y a la de tantas familias que no tienen los medios para enfrentar una crisis de la cual les será difícil recuperarse. A la vez, me inspira la valentía, la solidaridad de quienes luchan en primera fila contra la #pandemia, desde los médicos y enfermeras hasta quienes hacen trabajo de limpieza en los hospitales.

Me llenan de admiración los bomberos, los policías, los empleados de los supermercados y las farmacias, los trabajadores agrícolas, toda esa gente valiosa que día a día ha estado saliendo de sus casas a cumplir con su deber. Me llenan de orgullo los periodistas ´´de la calle,´´ los que salen diariamente de sus hogares a reportar las noticias para mantenernos informados y también los que han podido convertir sus hogares en trincheras del buen periodismo. Tenemos muchos de ellos aquí en el sur de Florida. En el largo ejercicio de mi oficio me tocó cubrir guerras, pero ninguna como esta.

Yo caí en el periodismo de carambola. Mi gran deseo hubiera haber sido músico, pero nací sin ese talento. De joven también soñé con ser escritor, pero ni la aptitud ni la suerte me acompañaron en mi ansiedad de dar rienda suelta a mi imaginación en tinta y papel, más allá de llenar gavetas y cajas de escritos mal logrados. Pero si bien no pude ser músico ni escritor, la vida y el destino me dieron la dicha de poder escuchar mucha música y leer mucho y me puso en el camino a un profesor que vio en mi un periodista y luego me topé con mucha gente que me dio oportunidades profesionales de las cuales me siento eternamente agradecido.

Yo pienso mucho en esas cosas en estos días. Y pienso en lo afortunado que he sido en vivir en este país de libertad y oportunidades que hoy atraviesa esta terrible crisis. Yo a veces pienso que si bien no pude escribir una gran novela, con la que he vivido me basta. Es una novela, que si bien, como toda realidad humana, tiene páginas tristes, abunda en alegría. Siempre ha sido así y lo es ahora, a pesar de los pesares. Tengo a mi familia, mis amigos, tengo mis libros, mi música, tengo mis recuerdos, entre ellos el de aquella noche en Nueva York hace años en que escuché a Gregory Porter y pensé que se merecía la fama. Hoy escuchaba esta canción que comparto aquí con ustedes. Me vino a la mente lo grande que es la cultura de Estados Unidos. Amo la cultura de este país, sus escritores, poetas, dramaturgos, actores, su danza, sus pintores y escultores. Y sobre todo su música. Hagan ´´clic´´ para escuchar.